• LIBROS

Entrada anterior

Los préstamos de Gomendio

Montserrat Gomendio es la secretaria de Estado de Educación o, dicho de otra manera, la mano derecha de Wert. Esta señora, por cierto, es una mujer adinerada; tanto que su patrimonio declarado suma la suculenta cifra de 14.5 millones de euros. Estoy seguro – segurísimo – que por ser "rica de cuna" nunca habrá solicitado una beca de estudios al ministerio que representa. Esta mujer – novia de Wert, desde el año 2012 – y "ex" de Eduardo Roldán – investigador del CIS – dudo mucho que, en sus años de estudiante, haya repartido publicidad por las calles de Madrid para pagarse la matrícula universitaria; dudo, también, que haya trabajado en "Telepizza" para costearse los libros y fotocopias y, dudo, valga la redundancia, que haya compartido piso de estudiantes con hijos de fontaneros, electricistas y barrenderos. Pues bien, esta mujer – la señora Montserrat Gomendio – ha dicho en el Fórum Europa una serie de "disparates" que ojalá – toco madera – no se hagan realidad, por la "paz educativa".

La novia de Wert ha propuesto la evolución del sistema de becas actual hacia un sistema de préstamos a la británica. ¿Qué significa eso?, que los alumnos devuelvan al Estado hasta el último céntimo de euro, de sus ayudas al estudio, cuando hayan finalizado los mismos y obtengan un trabajo. En Inglaterra, los estudiantes tienen la obligación de devolver a las arcas públicas la totalidad del importe de sus "préstamos" cuando han conseguido un empleo de más de 21.000 libras anuales, o sea, 26.250 euros, en términos españoles. Gomendio se sorprende que en nuestro país “los estudiantes – cito palabras de su boca- reciban cuantías importantes de dinero que no tienen que devolver". Montserrat también sostiene que nuestro sistema de becas tiene un "coste muy elevado", en comparación con otros países. Según la OCDE – desmintiendo a Gomendio- España está a la cola en ayudas universitarias. Mientras el Gobierno de Rajoy destina 0.11% del PIB a becas, la media de de los países europeos destinan – de media – el 0.29%. "También hay otros modelos – en palabras de CCOO – como el caso alemán en el que las matriculas son gratuitas y la inversión en becas mucho mayor". Luego, no somos los más protegidos de Europa, como afirma esta señora.

El "disparate" de Gomendio supondría – en el hipotético caso de llevarse a cabo – un desmantelamiento en toda regla del derecho a la educación. La brecha entre "los de arriba" – los niños bien del Pepé – y “los de abajo" – los hijos de los rojos- sería tan ancha que estaríamos, otra vez, en la España gris de la postguerra. La misma España en la que solamente podían estudiar los "hijos de" – la derecha-; una élite afín al régimen de Franco, en contraste con una aplastante mayoría analfabeta, condenada a la incultura. El sistema de préstamos, propuesto por esta señora, estaría bien – aunque no lo comparto, en absoluto –  si todos los estudiantes – sin discriminación por raza, sexo o condición – tuviera derecho a ellos y en este país hubiese pleno empleo, como garantía absoluta de devolución. No olvidemos que un "sistema de préstamos" es algo bien distinto a un "sistema de becas". Mientras las becas son "ayudas" sin obligación a devolución, los préstamos, por su parte, son concesiones con obligación de devolución y, sujetos a garantías, avales y demás. 

Conociendo como conocemos, de sobra, a la derecha,  los préstamos serían concedidos a cuenta gotas a quienes obtuvieran las mejores notas; quedando sin ellos, la inmensa mayoría de los estudiantes; aquellos que, por "h" o por "b", no hubieran sido capaces de obtener la nota establecida por el ministro de turno, o sea, Wert, para tener derecho a los mismos. Así las cosas, miedo me da, lo que esta pareja de "ricos acomodados" – Ignacio y Montserrat – están tramando desde los fogones de Génova. Miedo me da, les decía, porque cuando "el río suena, agua lleva", y esta propuesta informal de "los préstamos a la británica" -planteada por Gomendio- es, más que probable, que algún día llegue a nuestras fronteras. ¿Les sorprendería? A mí no. En ese supuesto, España volvería a los tiempos de Franco. El sistema de préstamos sería una vuelta de tuerca más al endémico Estado del Bienestar; las becas desaparecerían y el Gobierno de Rajoy se convertiría en prestamista de jóvenes necesitados. Muchos jóvenes, ante la incertidumbre que les supondría tener que devolver, cuatro o cinco euros al Estado – al finalizar sus estudios -, optarían por: no estudiar o, estudiar Formación Profesional, más barato que una carrera; justo lo que pretende este Gobierno con los préstamos "thatcheristas". Una vez más, el cierre de la derecha a la movilidad social de la izquierda vuelve a ser manifiesto, tras los disparates de Gomendio. ¡Toquemos madera!

Deja un comentario

1 COMENTARIO

  1. Soñar es gratis !

    Responder

Deja un comentario

  • SOBRE EL AUTOR

  • Abel Ros (Callosa de Segura, Alicante. 1974). Profesor de Filosofía. Sociólogo y politólogo. Dos libros publicados: «Desde la Crítica» y «El Pensamiento Atrapado». [email protected]

  • Categorías

  • Bitakoras
  • Comentarios recientes

  • Archivos

  • Síguenos